Dueño de lavado de autos demanda $50 millones por violento arresto de ICE en LA

Dueño de lavado

Un ciudadano estadounidense de 79 años, dueño de un lavado de autos en Los Ángeles, presentó una demanda federal de derechos civiles por $50 millones de dólares, tras denunciar que fue violentamente arrestado por agentes de ICE durante una redada de inmigración en su negocio.

Rafie Oliah Shouhed, propietario de Valley Car Wash en el área de Van Nuys, acusó que fue golpeado e inmovilizado violentamente el 9 de septiembre en un operativo de inmigración.

En la demanda se mencionan como acusados al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), la Patrulla Fronteriza y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).

El 9 de septiembre, agentes enmascarados irrumpieron en Valley Car Wash, ubicado en 7530 Van Nuys Boulevard, donde las cámaras de vigilancia muestran a un agente federal empujando a Shouhed al suelo en un pasillo.

En entrevista con la cadena KTLA, Shouhed dijo que salió a hablar con los agentes para presentar pruebas de que sus empleados estaban legalmente autorizados para trabajar; sin embargo, fue insultado, golpeado y arrojado contra el pavimento.

De acuerdo con la demanda de derechos civiles, tres agentes se le echaron encima sobre la espalda, uno le puso la rodilla en el cuello mientras los otros lo sujetaron de los brazos.

“Agarraron a uno de mis empleados y les dije: ‘Esperen, algunos de estos tienen papeles, tienen aquí la documentación’. Y lo único que dijeron fue: ‘No se metan con ICE. Estamos aquí’. Me tiraron al suelo, y tres de ellos se me echaron encima“, dijo Shouhed después del incidente.

El propietario del negocio les dijo a los agentes que recientemente había sido sometido a una cirugía cardiaca, que tenía tres stents y no podía respirar. Sin embargo, los agentes federales lo ignoraron.

Shouhed fue esposado y trasladado al Centro de Detención Metropolitano, en el centro de Los Ángeles, donde permaneció retenido durante 12 horas sin recibir atención médica.

El dueño del lavado de autos mencionó que, pese a que los agentes reconocieron que era ciudadano estadounidense, le negaron las llamadas telefónicas a su familia. Finalmente, fue liberado sin cargos.

Después de salir del centro de detención, Shouhed fue atendido en un hospital por múltiples costillas fracturadas, lesiones en el codo, contusiones y síntomas postconmocionales de una lesión cerebral traumática, y aseguró que continúa sufriendo secuelas físicas y psicológicas.

La demanda fue presentada por el abogado V. James DeSimone, quien declaró que las acciones de los agentes federales fueron “escandalosas e ilegales”, ya que violaron las leyes de derechos civiles federales y de California.

En la demanda se alegan agresiones, lesiones, violación de la Ley Bane de California, indiferencia deliberada ante un estado médico grave, infligir intencionalmente angustia emocional y otros agravios.

Además, se hace referencia a que las agencias federales de inmigración mantienen políticas que toleran el uso excesivo de la fuerza.

Durante la redada en el lavado de autos, cinco de los trabajadores también fueron detenidos, según informó la familia de Shouhed.

En un comunicado, el Departamento de Seguridad Nacional dijo que el operativo tenía como objetivo detener a cinco inmigrantes indocumentados, y que Shouhed, ciudadano estadounidense, fue arrestado por presuntamente agredir y obstaculizar a un oficial federal.